En una jornada marcada por el homenaje al Sargento Juan Bautista Cabral, la vicepresidenta Victoria Villarruel visitó Corrientes, donde fue recibida por el gobernador Gustavo Valdés y desplegó una agenda institucional que incluyó actos protocolares y reuniones privadas.
El viaje se produjo en un momento de máxima fricción con Javier Milei, quien en los últimos días acusó públicamente a su compañera de fórmula de participar de un supuesto “golpe institucional”, luego de que el Senado avanzara con una sesión convocada por la oposición. Allí se aprobaron proyectos sensibles para la política económica del oficialismo, como aumentos en las jubilaciones mínimas, que posteriormente fueron vetados por el Ejecutivo.
Villarruel arribó a la ciudad de Corrientes alrededor de las 10 de la mañana y mantuvo una reunión con Valdés en la Casa de Gobierno provincial. Tras el encuentro, ambos recorrieron la Plaza 25 de Mayo y la iglesia Nuestra Señora de la Merced, antes de visitar el predio de “La Unidad”, un nuevo desarrollo cultural y comercial que avanza sobre el terreno de la ex cárcel correntina.
Más tarde, la comitiva se trasladó a la localidad de Saladas, donde se realizó el acto central en conmemoración de Cabral. Allí participaron del traslado simbólico de restos de los Granaderos hasta la histórica casona donde vivió el militar, hoy convertida en museo nacional. La jornada cerró con una ceremonia y un desfile cívico-militar en la Plaza Cabral.
El despliegue institucional de Villarruel en el interior del país se da en paralelo a un momento de aislamiento político dentro del oficialismo, en el que el Presidente decidió apuntar directamente contra su vicepresidenta, tensionando aún más la interna libertaria.
Victoria Villarruel cruzó a un grupo de senadores por la propuesta sobre el uso de los baños del Senado
La vicepresidenta, Victoria Villarruel, se metió en la polémica por el reclamo que hicieron un grupo de senadores de Unión por la Patria sobre el uso de los baños públicos del Senado por parte de los efectivos de las fuerzas de seguridad. Ante el pedido de la bancada opositora, la titular de la Cámara alta le envío una nota crítica al legislador Oscar Parrilli.
“En toda comunidad organizada se acuerda que los agentes del Estado deben ser tratados con respeto y sin estigmatización alguna, principio que fue violado sistemáticamente en los sucesivos gobiernos kirchneristas”, sentenció.
En medio de las internas con el presidente Javier Milei, la vicepresidenta publicó un mensaje por la polémica de los baños del Senado. La respuesta de Villarruel llega a dos semanas de iniciado el conflicto y diferenciada de lo que fue la respuesta inicial del Gobierno, encabezada por al ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
“Los senadores kirchneristas reclamaron que las fuerzas federales no usen los baños e instalaciones del Senado. Hoy les respondí que mientras sea Vicepresidente de la Nación, no hay lugar para la estigmatización de los uniformados“, escribió en un crítico mensaje en sus redes sociales.
“A Parrilli y su pandilla que no quieren ver uniformes en el Congreso, les quiero recordar que la Casa de las Provincias nos alberga a todos y siempre hay lugar para quienes portan el uniforme con honor”, sentenció.
En su réplica, Villarruel aclaró que todos los miércoles – cuando ocurre el habitual el despliegue de efectivos y la represión contra la manifestación de jubilados – las fuerzas de seguridad llevan sus propios baños químicos. En este sentido, remarcó que lo que ocurrió el otro día fue a raíz de que no se pudieron tomar las medidas habituales.