“El tiempo pasa. Nos vamos poniendo viejos…”, cantaba Pablo Milanés (1943-2022) en su clásico tema Años, que lanzó allá por la década del 70. Y mientras la Generación Z googlea de qué se trata, en Núñez el tiempo también pasa y Kevin Castaño todavía no llega. El acuerdo con el Krasnodar ya está charlado y confirmado en lo que respecta a números y condiciones, pero el colombiano continúa en Rusia a horas de la reanudación del torneo local tras el parate que comenzó en diciembre y en River tomaron una decisión final.
Después de varias ofertas superadoras para tratar de alcanzar las pretensiones de Krasnodar, desde las oficinas del Monumental se estiraron a una cifra que ronda los 9 millones de dólares por un porcentaje mayoritario de de su pase (Cruz Azul de México también tiene un porcentaje de la ficha), pero todavía no está definido cuándo cerrará las valijas para viajar rumbo a Buenos Aires.
En las últimas horas, los rusos pusieron como condición liberarlo después de los partidos ante Krylia Sovetov (este sabado) y FC Pari Nizhniy Novgorod (7 de marzo), que se acerca al plazo límite con el que cuenta River para incorporar (12/3). Ante esta situación, se trabaja para tratar de sumarlo cuanto antes y el CARP comenzó a presionar con la billetera y una postura clara.
Desde Núñez no habría desembolso inicial hasta que el jugador llegue a nuestro país y cumpla con la revisión médica correspondiente y la firma de un contrato (los números están acordados con Castaño) que será por los próximos cuatro años.