25 febrero, 2025

La hora de los empresarios nacionales

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El grupo Telecom, liderado por Clarín, se quedó con Telefónica de Argentina a cambio de US$1245 millones.

En menos de dos semanas, dos grandes multinacionales anunciaron desinversiones del mercado argentino. Primero fue la automotriz alemana Mercedes-Benz y ahora se acaba de sumar el grupo español Telefónica. Si bien se trata de rubros muy diferentes, las dos operaciones tienen un par de puntos en común. El primero es la razón que explica la decisión de ambas multis de dejar la Argentina. Y el segundo es el resultado final: en las dos operaciones, los compradores terminaron siendo grupos locales.

Tanto en el caso de Mercedes-Benz como en el de Telefónica las decisiones de vender sus operaciones en el país no se explican exclusivamente por la Argentina y forman parte de una estrategia de desinversión a nivel regional. Antes de desprenderse de su planta en Virrey del Pino, la automotriz alemana ya había vendido su fábrica de Brasil a manos de un grupo chino.

Por su parte, Telefónica venía trabajando en un plan de desinversión a nivel regional desde hace más de cuatro años. A fines de noviembre de 2019, el entonces presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, había anunciado una nueva estrategia que incluía la venta de sus filiales en la región para concentrarse en cuatro mercados: España, Alemania, Reino Unido y Brasil. Bajo este nuevo norte, el grupo español primero se desprendió de las operaciones en algunos mercados de América Central y después avanzó con la incorporación de socios en Chile, Perú y Colombia.

Oficialmente, en Telefónica de España nunca reconocieron la decisión de irse de la Argentina, aunque en su momento iniciaron negociaciones con el grupo Olmos -los dueños de Crónica TV- que no llegaron a buen puerto. Con el cambio de gobierno argentino y un clima más amigable para los negocios, a fines de 2024 en la casa matriz de Madrid retomaron la búsqueda de un comprador y le otorgaron un mandato de venta al banco JP Morgan que finalmente terminó encontrando al candidato.

Las dos operaciones además comparten un mismo tipo de comprador. En el caso de la planta de Mercedes Benz, el nuevo dueño es un consorcio inversor encabezado por el financista Pablo Peralta, del grupo ST, mientras que en Telefónica de Argentina acaba de pasar a manos de Telecom, liderada por el grupo Clarín, a cambio de US$1245 millones.

La planta de Mercedes-Benz donde se fabrica la van Sprinter también acaba de pasar a manos de un grupo local, liderado por el empresario Pablo PeraltaMercedes-Benz Argentina

El esquema de una multinacional vendiendo su negocio en la Argentina a un jugador local se viene repitiendo en la mayoría de las grandes operaciones que se concretaron en los últimos meses. Antes de Mercedes-Benz y Telefónica, el mismo camino lo tomaron otras compañías internacionales, como Procter & Gamble, que le transfirió el manejo de sus marcas a dos grupos locales: Newsan (que lidera el negocio de electrónica en Tierra del Fuego) y Dreamco (los dueños de Plusbelle y El Zorro). Algo similar sucedió con DirecTV, que le terminó vendiendo su operación en la Argentina al grupo Werthein, otro de los que en su momento hizo una oferta por Telefónica de Argentina.

El modelo también se repitió con la empresa alemana Edding, cuando hace poco más de un año decidió irse del país y venderle su filial argentina por US$1 al grupo Mendizábal (el importador de Stanley) y con McCain, que se desprendió de su marca Sibarita a manos de Molinos Río de la Plata, del grupo Perez Companc.

En el rubro financiero, también se cumplió la regla de “inversor local compra a multi” con las operaciones del Grupo Financiero Galicia quedándose con el HSBC Argentina, y el Banco Macro -de las familias Brito y Carballo- adquiriendo el negocio del Itaú.

ExxonMobil se desprendió de sus yacimientos locales a manos de la petrolera local PluspetrolLM Otero – AP

Incluso la mayor operación de venta de una empresa en la Argentina en el último año fue protagonizada por un grupo local, cuando la familia Rey (los dueños de Pluspetrol) se quedó con los activos locales de la multinacional ExxonMobil, a cambio de nada menos que US$1700 millones.

En todos los casos, está claro que la economía local resulta mucho más atractiva para los jugadores nacionales, que cuentan con el know-how y la experiencia para manejarse en un mercado relativamente pequeño y no siempre fácil de abordar como es el argentino.

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