Siguen las malas noticias para Kevin Spacey: fue apartado de la producción del filme Gateway to the West, drama histórico dirigido por el húngaro Péter Soós -tenía previsto interpretar a un hombre de fe en tiempos del Genghis Khan- luego de que a finales de mayo pasado fuera imputado por la Justicia del Reino Unido en cinco cargos de agresión y abuso sexual.
Según informó el sitio especializado Variety, Spacey será reemplazado en el elenco de la película, que era uno de sus primeros proyectos en el rubro desde 2017, cuando recibió la primera de muchas denuncias por esos delitos tras el testimonio de Anthony Rapp, un colega que aseguró que había abusado de él cuando era un adolescente durante una fiesta en la década de los ’80.
Aun así, el actor todavía está convocado para trabajar en otros filmes, entre ellos The Man Who Drew God, del realizador italiano Louis Nero, quien en diálogo con la prensa internacional justificó la decisión, ya que en su país no conocen todos los detalles: “No hablamos de lo que no sabemos. No puedo opinar de estas cosas, sólo sé que Kevin es un gran actor. Esa era mi única preocupación”, aseguró.
Sin fotos permitidas, una ilustración de cuando Spacey escucha, este jueves, los cargos en su contra en el “Old Bailey”. Foto Reuters
En tanto, los productores detrás de la próxima película Peter Five Eight, de Michael Zaiko Hall, en la que Spacey también forma parte del elenco principal, señalaron en un comunicado público que si bien es “desafortunado el crecimiento de las coberturas negativas en la prensa” contra el intérprete de 62 años, “también es algo esperable”.
“Hay quienes desean que deje de actuar, pero son muchos más los fans alrededor del mundo que esperan que un artista del que disfrutaron durante décadas vuelva a la pantalla. La producción no tiene conocimiento alguno o comentario sobre las acusaciones, y cree que es un tema de la Justicia determinar si son válidas”, aseveraron.
Se declara inocente
El actor de 62 años está acusado de cinco cargos de agresión y abuso sexual. Foto AFP
El jueves, Spacey se declaró inocente en los tribunales penales británicos de Old Bailey, donde compareció de cara al juicio que comenzará el 6 de junio de 2023 tras ser imputado a fines de mayo último por tres presuntas víctimas de hechos ocurridos entre marzo de 2005 y abril de 2013.
De acuerdo a la información difundida en ese momento por la agencia AFP, las causas de la fiscalía de la Corona se basan en “una revisión de las pruebas recogidas por la policía londinense” en la investigación de la presentación de los denunciantes.
Dos de los cargos corresponden a abusos sexuales cometidos en marzo de 2005 en Londres a un mismo denunciante, otra a una segunda víctima en agosto de 2008, y finalmente el cuarto cargo corresponde a un tercer denunciante al que habría abusado en abril de 2013 en Gloucestershire, en el sudoeste de Inglaterra.
Ganador de dos Oscar, enfrenta desde 2017 una verdadera ola de acusaciones también en los Estados Unidos. Foto Reuters
Todas las imputaciones corresponden a la época en la que Spacey dirigía artísticamente el teatro Old Vic de Londres.
Años después, cuando empezaron a surgir las demandas contra el actor en su país de origen, una investigación interna del teatro recogió “20 testimonios de presuntos comportamientos inapropiados” que no habían salido a la luz.
Además de estos nuevos cargos en suelo británico, el doble ganador del Oscar por Los sospechosos de siempre (1995) y Belleza americana (1999) y de numerosos galardones por la serie House of Cards enfrenta desde 2017 una verdadera ola de acusaciones en los Estados Unidos por delitos de índole sexual en medio del movimiento #MeToo.
POS