La China Suárez y Mauro Icardi atraviesan uno de sus mejores momentos, instalados en Turquía y alejados de las turbulencias del pasado. Con la mudanza ya asentada y los tres hijos de la actriz acompañándola en esta nueva etapa, la pareja decidió compartir una postal de lo que fue un fin de semana cargado de emociones, tanto en lo deportivo como en lo personal.
Días atrás, Mauro regresó a las canchas después de más de casi un año de inactividad por una dura lesión en la rodilla. Y lo hizo de la mejor manera: con victoria y goleada del Galatasaray. Este mismo fin de semana volvió a repetir pero con un dato más que importante: la China estuvo presente en la tribuna apoyando a su novio. Y no lo hizo sola, sino con sus hijos.
Desde los palcos del estadio, la China no se perdió ni un minuto del partido del Galatasaray frente al Rizespor y fue protagonista de un festejo que rápidamente dio la vuelta por las redes. Es que Icardi volvió a meter un gol, agónico y como parte del 3-1 que formó parte del triunfo de su equipo. En ese mismo momento, la explosión de alegría fue total.
Abrazada a Rufina, su hija mayor, la China celebró con euforia el tanto de su pareja. Los hinchas turcos también captaron el momento y lo compartieron en las plataformas, donde se la ve saltando, cantando y viviendo el clima del estadio como una fanática más. Minutos después, fue ella misma quien subió fotos de esa jornada especial, mostrando una faceta íntima de la experiencia.
LAS FOTOS DE LA CHINA SUÁREZ Y SUS HIJOS ALENTANDO A MAURO ICARDI EN LA VICTORIA DEL GALATASARAY
En las postales que publicó se la ve con sus hijos en la platea, rodeada por un mar de banderas rojas y blancas. Luego, un primer plano que dejó ver su look con maquillaje impecable y la camiseta del club turco en primer plano, un gesto claro de apoyo a Icardi y a su nuevo presente. En otra de las imágenes, se la ve relajada junto a una de las niñas, compartiendo una bebida y riéndose a cámara.
Pero quien se robó todas las miradas fue Amancio. El hijo menor, fruto de su relación con Benjamín Vicuña, fue retratado con la camiseta del Galatasaray mientras agitaba con entusiasmo una bandera de Turquía. Una escena que dejó en evidencia no solo la integración de la familia en esta nueva vida, sino también la conexión que los niños parecen tener con Icardi.
Detrás de estas postales también hay una realidad más fuerte. Si bien Rufina decidió instalarse en Estambul para probar una nueva experiencia escolar, la situación con Magnolia y Amancio es distinta. Ellos viajan cada 15 días, ya que Vicuña no autorizó una mudanza definitiva. Eso derivó en un régimen legal estricto, con permisos de viaje firmados cada vez que los niños vuelan. ¿Qué dirá el chileno ahora que ve todo este vínculo que sus hijos parecen tener también con Mauro?